¿Cómo queremos envejecer?

Es una pregunta que nos hacemos cuando llegamos a una edad madura. Taray tiene una respuesta: vivir en un espacio físico, amigable, acompañado de un grupo de personas con los mismos objetivos e inquietudes, de forma activa, solidaria y colaborativa el resto de nuestra vida. Este modelo de convivencia viene importado de Europa con el término inglés “cohousing” que en nuestro rico idioma podemos expresar como “viviendas colaborativas”.

Actualmente en nuestro país se ha introducido en varias provincias y el Ayuntamiento de Rivas no ha querido perder esta oportunidad y a través de la EMV ha decidido ceder tres parcelas en el entorno del Barrio de la Luna a tres asociaciones que presentaron su proyecto, entre ellas está Taray.

Hasta el próximo mes de Junio estaremos recibiendo unos talleres que pretenden  ayudarnos a cómo convivir, descubrir nuestros valores y fortalezas, conocernos mejor y apoyarnos en todo lo necesario para constituirnos en cooperativa, cómo cuidarnos respetando nuestra libertad, cómo gestionaremos la dependencia sin perder la dignidad e implementar el Modelo de Atención Integral Centrado en la Persona (MAICP) entre muchas otras cosas.

Nuestro proyecto de vida tiene muchos alicientes, todo está por hacer y todos podemos colaborar. Vamos a construir nuestras viviendas adaptadas a nuestras necesidades, sin impedimentos arquitectónicos, con eficiencia sostenible, con ambientes saludables, a nuestra medida, escuchando las sugerencias de todos y de los profesionales que contratemos, pensando en las futuras dependencias que podamos tener y por supuesto
espacios y servicios comunes dirigidos a toda la comunidad.

El proyecto consta de 30 viviendas en las que vamos a residir 1 o 2 personas en cada una, en régimen de cooperativa sin ánimo de lucro, en cesión de uso, es decir las viviendas pertenecen a la cooperativa y con ésta fórmula se elimina la inversión para especular y se invierte en un proyecto de vida.

En breve, la asociación Taray se convertirá en cooperativa del tipo que más nos convenga y nos dejen, estaremos alertas a cualquier tipo de ayuda o subvención, definiremos nuestro modelo de autogestión y aprovecharemos todos los servicios sanitarios a los que tenemos derecho complementándolos con servicios externos profesionales.

Se nos ocurren varios caminos de cómo envejecer, mientras somos autosuficientes, con normalidad en nuestro entorno actual. Cuando la salud empieza a fallar podemos pensar en vivir con nuestra familia ascendente/descendente, ambas partes tendrían que renunciar a muchos valores que pudieran llegar a socavar la convivencia. Por último está la Residencia de mayores que para el que haya tenido y sufrido la experiencia con algún familiar habrá observado muchas deficiencias, perdida de libertades y valores, horarios de visita limitados y disciplinas impuestas. Solo lo soportarás si te adaptas. En Taray tendrás tu libertad, tu independencia, tus visitas sin horarios, tus nuevos mejores amigos, todo lo que necesites para lograr nuestro ansiado proyecto de vida.

Después de todo esto, evaluando los pros y los contras lo tenemos muy claro, nosotros nos unimos a TarayViviendasColaborativas.

Si no superas los 70, todavía queda alguna plaza ¡¡¡ no te lo pienses mucho, mañana podría ser tarde!!! Estamos en la red para lo que necesites.