La investigación se inició el pasado mes de abril, a raíz de las quejas vecinales que alertaban del continuo trasiego de jóvenes a una vivienda de la urbanización, y que provocaban diversas molestias a los vecinos, sospechándose de que pudieran acudir hasta el lugar a comprar algún tipo de sustancia ilegal.
En un primer lugar los Agentes procedieron a identificar y denunciar a jóvenes, muchos de ellos menores de edad, quienes portaban en el momento de ser requeridos por la Guardia Civil , sustancias estupefacientes, manifestando voluntariamente que las habían adquirido en una vivienda de la urbanización.
Gracias a los datos aportados por los vecinos, se lograba ubicar la vivienda e identificar a sus propietarios, por lo que con la correspondiente autorización judicial, se realizaba un registro en el domicilio donde se localizaron cerca de 256 gramos, útiles para el pesaje y distribución de la misma, casi 250 euros en dinero fraccionado, dieciocho teléfonos móviles, tablets, ordenadores portátiles, una caja fuerte que contenía una tableta de hachís y una balanza de precisión, una máquina de diagnosis de vehículos, tres turismos, una motocicleta, armas blancas, y una réplica de un arma de avancarga, además de cartuchería.
Los detenidos han pasado a disposición de la Autoridad Judicial competente.