La judoka, que entrena con el club Judo Club Rivas, perdió in extremis su combate por la medalla de bronce ante la representante italiana. En la competición por equipos, la judoka consigue el bronce con su club en categoría absoluta. Manzanero, con discapacidad visual total, es campeona del torneo que organiza la ONCE en esta modalidad.
María Manzanero, judoka invidente que entrena en el Judo Club Rivas, quedó quinta en el Campeonato de Judo para personas ciegas que organiza la Federación Internacional IBSA. El campeonato se celebró el 4 de septiembre en la localidad italiana de Cagliari, en la isla de Cerdeña.
María realizó una magnífica competición, perdiendo su combate por la medalla de bronce con la judoka italiana, por inmovilización. Un combate que María había dominado en judo pie, pero en el que, en un lance del combate que las llevó al suelo, no pudo controlar la pierna de la italiana, cosa que ésta aprovecho para inmovilizar a María.
La judoka del Judo Club Rivas participó también en la competición por equipos, obteniendo con el de su club la medalla de bronce en la categoría absoluta.
Un caso excepcional
Manzanero es una judoka con discapacidad visual total que lleva entrenando en el Judo Club Rivas desde antes de la pandemia, lo que conlleva «un gran esfuerzo para ella, ya que la sala de entrenamiento no está adaptada», aseguran desde el club. Se trata, pues, de un caso excepcional, pero no único, ya que en el club ripense entrenan otras personas con discapacidad visual.
La judoka quedó este año campeona de la ONCE en la categoría absoluta de menos de 57 kg., siendo todavía junior, por lo que según los entrenadores nacionales puede ser una judoka con una gran proyección para las Paraolimpiadas de Paris 2024.
