Más de 3.840 firmas lleva recogidas la iniciativa que Luis Carretero ha lanzado en la plataforma Change.org. Carretero, vecino de Rivas, fue despedido recientemente de su trabajo en las oficinas centrales de MAPFRE, tras solicitar la aplicación de la legislación vigente en materia de conciliación laboral y familiar. Pedía solamente que le permitieran entrar dos días al mes quince minutos más tarde de la hora de comienzo de su jornada, con el fin de seguir el progreso escolar de uno de sus hijos, quien tiene reconocida una incapacidad del 67%.
Carretero, recientemente separado pero que quiere «mantener todos los lazos posibles con mis hijos y corresponsabilizarme en su educación», está siendo apoyado por diferentes colectivos, entre ellos las Marchas por la Dignidad. En Rivas, Luis se entrevistó en plena temporada veraniega con concejales de Rivas Puede, quienes le aseguraron el máximo apoyo posible. Pendiente está la reunión que busca mantener con otros grupos municipales de la corporación ripense.
Hasta la segunda semana de agosto varias decenas de compañeros y compañeras de Luis Carretero le han estado acompañando, todos los jueves de 10 a 12 de la mañana, en la concentración que con todos los permisos legales mantienen ante la puerta de la sede central de MAPFRE, en la calle Luchana de Madrid. El pasado jueves, 11 de agosto, se realizó la última concentración hasta septiembre, porque, asegura el interesado, «apenas queda gente en Madrid, e incluso en las oficinas hay también pocos trabajadores que nos puedan escuchar».
El caso de Luis Carretero ha sido llevado a la plataforma Change.org, donde ha recogido ya más de 3.800 firmas en apoyo a su readmisión.
