Uros de Rivas comienza con victoria ante Pozuelo su fase de ascenso a Liga EBA

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Pablo Giménez conduce el balón hacia la zona del CB Pozuelo en el partido disputado esta tarde en el Antonio Díaz Miguel de Madrid. (Foto: Kike Ayala)

Se ha impuesto esta tarde (62-68) a un fortísimo Pozuelo CB que había arrasado en la fase regular de su grupo. Los ripenses se han mantenido casi todo el partido entre el empate y los ocho puntos abajo, pero un empujón final lleno de aciertos y algunos gruesos errores del rival han permitido la remontada y terminar con relativa comodidad el partido. En el otro duelo de la jornada, Casvi se ha impuesto a Xperia y lidera la tabla junto con Rivas.

ÁLBUM DE FOTOGRAFÍAS DEL PARTIDO DE KIKE AYALA

Emocionante partido lleno de fuerza el jugado esta tarde entre Pozuelo CB y Aticon Uros Rivas en el polideportivo Antonio Díaz Miguel, de Madrid. Pozuelo venía de arrasar en la fase regular de su grupo de Primera Nacional y comparecía como favorito en el duelo con los ripenses. Un equipo, el pozuelero, de calidad, muy compensado y con unas torres que podían hacer (e hicieron) mucho daño al juego interior de Uros, a pesar de la lesión del pivot grande de Pozuelo, Rafa Castro, que apenas poner el pie en el parquet tuvo que pedir el cambio y retirarse al vestuario. Con todo, las espadas estuvieron prácticamente en alto casi todo el primer cuarto, no despegándose ningún equipo más allá de los cuatro puntos.

Al final de ese primer cuarto, sin embargo, unos minutos espesos en ataque por parte de los ripenses permitieron que Pozuelo alcanzara una renta de ocho puntos, sobre todo gracias a tres triples que cayeron como jarros de agua fría en el equipo de Rivas. El segundo cuarto comenzaba con esa desventaja para los de Juanjo Simón y planeaba la sombra del desastre en un partido clave, en el que comenzar ganando lo es casi todo para afrontar el resto de la fase.

Fue ahí cuando Ajero, el abuelo, y Miguel Zamora, el nieto, se encargaron de derribar esa sombra. El primero con tres estupendas jugadas bajo el aro, totalmente marca de la casa. Y el segundo, con dos triples que levantaron del asiento a los muchos seguidores de Uros que se habían dado cita en las muy pobres gradas de un polideportivo absolutamente inapropiado para una fase de ascenso a Liga EBA.

Al descanso se llegó, gracias a ello, con un empate a 33 puntos, lo que significaba que Uros tenía más posibilidades de las que muchos podían haber pensado antes del partido.

Tras el paso por vestuarios, Pozuelo volvió a coger la manija y de nuevo consiguió una renta mínima pero cómoda: durante casi todo el tercer cuarto los pozueleros se mantuvieron arriba en el marcador, con rentas que oscilaban entre los cuatro y los ocho puntos. Rivas se acercaba periódicamente, pero no conseguía rebasar la marca de su rival. Al final de este periodo Pozuelo aventajaba a Rivas por cinco puntos. Nada insalvable, pero preocupante por la aparente incapacidad de los ripenses de tomar el mando.

Y el comienzo del último cuarto mostró la misma cara que el anterior: dominio sutil, pero continuado de Pozuelo hasta la mitad del periodo. Fue ahí cuando, quizás por el cansancio de un partido jugado hasta entonces a un alto nivel físico, Rivas encontró un resquicio en la coraza del enemigo. Y vaya si lo aprovechó. Entraban los triples de Zamora, pero también de Aguado, Javi González, Javi Carpio o Pablo Giménez. Y para regocijo de la abundante hinchada de Uros, se conseguían entradas a canasta y tantos bajo el aro, a pesar de la amenazadora presencia de Carlos Millán, que puso tres tapones de los que hacen daño.

Muy bien jugados los últimos dos minutos por parte de Juanjo Simón, un «hombre tranquilo» que transmite a sus jugadores la clase de calma que se necesita en una fase como ésta. Rivas había alcanzado su máxima ventaja (cuatro puntos) y logró incrementarla gracias a una extraordinaria defensa y al acierto que se le había negado en otras fases del encuentro. A falta de 50 segundos la renta favorable era de seis puntos y ahí fue cuando Pozuelo cometió algunos errores en faltas que no le convenían. Sí le vinieron muy bien a Uros, que provecharon casi todas las opciones y lograron mantener esa última ventaja hasta el pitido final.

Mañana, a las 13:00 h,, en el mismo polideportivo (calle Joaquín Dicenta, 1, en Madrid, detrás de la Plaza de Castilla) Uros se enfrentarán al que puede ser el más flojo de los rivales: Xperia Zentro San Jorge, que también esta tarde ha perdido su duelo con Casvi (63-72). Sin embargo, precisamente este equipo necesita una victoria si no quiere despedirse prácticamente de sus posibilidades.