17 kilómetros y 69 minutos diarios, medias de la movilidad de los madrileños en día laborable

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Foto Comunidad de Madrid
Foto Comunidad de Madrid

La Comunidad de Madrid radiografía la movilidad de los madrileños en un día laborable con su Encuesta Domiciliaria de Movilidad 2018. Cada madrileño hace una media de 2,4 viajes al día, recorre 17,1 kilómetros y dedica 69 minutos a sus desplazamientos. El 61% de los desplazamientos que se realizan en la región se hacen en modos de transporte sostenibles. El número de usuarios del transporte público crece de manera ininterrumpida desde 2014. Metro y la EMT, los medios más utilizados.

En la Comunidad de Madrid se realizan 15,8 millones de viajes en un día laborable, de los cuales el 61% se hacen utilizando modos sostenibles, desde el transporte público o la bicicleta hasta los trayectos a pie o en patinete. Ésta es una de las principales conclusiones de la Encuesta Domiciliaria de Movilidad 2018, cuyos resultados presentó recientemente el consejero de Transportes, Movilidad e Infraestructuras del Gobierno regional, Ángel Garrido, que ha destacado que la Comunidad de Madrid está entre las diez regiones de Europa en las que el porcentaje de uso de modos de transporte sostenible es más elevado.

“Esta Encuesta Domiciliaria de Movilidad, la primera desde 2004, nos ofrece una imagen nítida y actualizada de cómo nos movemos los madrileños y nos aporta el conocimiento para poder intervenir en la oferta de transporte público con precaución, precisión y responsabilidad”, ha señalado Garrido en el acto de presentación del estudio, en una jornada celebrada en el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Madrid.

El objetivo de la Encuesta, que impulsa el Consorcio Regional de Transportes, es analizar los desplazamientos cotidianos de los madrileños en un día laborable desde todos los ángulos. Para ello, entre los meses de febrero y mayo de 2018, se han realizado 85.000 entrevistas, personales y telefónicas, para conocer los hábitos de movilidad de la población mayor de 3 años de edad residente en la región. El informe definitivo con los resultados de la encuesta se finalizó el pasado mes de noviembre.

Según esta radiografía de la movilidad, en la Comunidad de Madrid, en un día laborable cada madrileño realiza una media de 2,4 viajes, recorre 17,1 kilómetros al día y dedica 69 minutos en sus desplazamientos. Desde la perspectiva de género, los patrones de movilidad entre hombres y mujeres son cada vez más similares.

Igualmente, la edad de las personas se refleja en la distribución horaria de sus viajes. Los más jóvenes se mueven más por la mañana, a mediodía y por la tarde, muy influenciados por el horario escolar. En cambio, las personas de mayor edad viajan con más frecuencia en la media mañana y, en menor medida, por la tarde.

La movilidad por trabajo y estudios supone el 43% de los viajes en la Comunidad de Madrid, siendo el desplazamiento al trabajo el más habitual (28%) y en el que más se utiliza el vehículo privado. Más de la mitad de los viajes con motivo de compras se realizan a pie. La proporción de viajes en transporte público es muy homogénea, aproximadamente un tercio con independencia del motivo del desplazamiento.

El transporte público, protagonista

“La Comunidad de Madrid es la región de España más dinámica en el uso del transporte público, tanto en términos absolutos como relativos”, ha subrayado Garrido, recordando los datos del último Observatorio de la Movilidad Metropolitana, que impulsa el Ministerio para la Transición Ecológica. De hecho, los madrileños realizan cada día más de cinco millones de etapas (cada tramo de viaje que requiere validación de título de transporte) en los distintos medios de transporte público. Los más utilizados son Metro de Madrid (39%) y los autobuses de la Empresa Municipal de Transportes-EMT (29%), seguidos por los autobuses interurbanos (14%) y el tren de la red de Cercanías (13%).

El número de usuarios del transporte público en la Comunidad de Madrid, que cayó a partir del año 2007 como consecuencia de la crisis económica, ahora crece de manera ininterrumpida desde el año 2014. Así, en estos últimos 5 años, el transporte público ha ganado cerca de 230 millones de viajeros, lo que supone un incremento cercano al 17%. Actualmente, se realizan en transporte público uno de cada cuatro viajes.

La Encuesta Domiciliaria de Movilidad 2018 refleja también los cambios demográficos, socioeconómicos y de desarrollo urbanístico que experimentado la Comunidad de Madrid desde 2004 y que han modificado sustancialmente la movilidad de los madrileños.

Así, en estos años, la almendra central de Madrid (distritos del interior de la M- 30) ha perdido casi el 4% de la población y más del 12% del empleo, que se han desplazado a zonas más alejadas de la capital. La población se ha dirigido en su mayoría tanto a los municipios de la zona más exterior de la Comunidad (corona regional) y como a los de la llamada corona metropolitana. Por su parte, el empleo se ha desplazado desde la capital hacia la corona metropolitana.

Este desplazamiento de población y puestos de trabajo ha supuesto cambios significativos en la movilidad de los madrileños y se ha traducido en un incremento del uso del vehículo privado en los municipios más alejados de Madrid ciudad. El vehículo privado supone cuatro de cada diez desplazamientos. Sin embargo, los habitantes de las coronas regional y metropolitana recorren más kilómetros de media en sus viajes en transporte público que con el vehículo privado.

Igualmente, los desplazamientos en medios de transporte mecanizados desde la corona metropolitana hasta Madrid almendra se hacen mayoritariamente en transporte público (52%) y el 61% de todos viajes se realizan en modos sostenibles. Este porcentaje se incrementa en la almendra central y los distritos periféricos de la capital (exterior de la M-30), donde el 80% de los viajes se realizan en transporte público, bicicleta, patinete o a pie.

Uno de cada tres viajes, a pie

La Encuesta también refleja que, desde 2004, se han multiplicado por cinco los viajes cotidianos en bicicleta y que los desplazamientos andando han crecido un 20%. De hecho, uno de cada tres viajes que se realizan en la Comunidad de Madrid ya se hacen a pie.

Los medios de movilidad sostenible superan el uso del vehículo privado en todas las zonas de la Comunidad salvo en la corona regional. Madrid es una de las diez regiones de Europa en las que el porcentaje de uso de modos de transporte sostenible es más elevado, según el Barómetro de la European Metropolitan Transport Authorities (EMTA).

“Los resultados de la encuesta nos indican en qué dirección debemos continuar trabajando desde el Gobierno de la Comunidad de Madrid para impulsar una movilidad sostenible, segura, accesible y que vertebre la región. Por eso, desde la Comunidad de Madrid apostamos por políticas que impulsen el uso del transporte público y se adapten a las nuevas necesidades de movilidad de los madrileños”, ha incidido Garrido.

Como ejemplos de medidas concretas, ha recordado la rebaja del 25% en el abono transporte para mayores de 65 años; el compromiso de aprobar una tarifa plana para el abono transporte durante los fines de semana para moverse por toda la región; o la puesta en marcha de la red de aparcamientos disuasorios Aparca+T, que permite a los usuarios del transporte público aparcar su vehículo
de forma gratuita.

“También vamos a apostar por una red de transporte público más transversal, que acompañe la mayor movilidad que ya existe entre las coronas exteriores de la Comunidad y que complete el actual modelo radial”, ha explicado. En esta línea se rediseñará la red de autobuses interurbanos, aprovechando el nuevo mapa de concesiones que se licitará al final de la legislatura; y se va a pedir al Ministerio de Transportes que priorice el nuevo eje transversal Este-Suroeste, entre San Fernando de Henares y Príncipe Pío, en el plan de Cercanías de Madrid.

Un modelo, ha añadido el consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid, que se va a reflejar en la futura Ley de Movilidad Sostenible, que establecerá un marco regulatorio para mejorar la movilidad en la región y contemplará la propia sostenibilidad económica del transporte público, con una parte de la norma dedicada a su financiación.